Imprescindible bajar a esta hermosa y salvaje playa que, con un kilómetro, es la más larga del concejo. Una vez en Oviñana nos desviamos a la izquierda después de pasar la iglesia, justo por delante del bar-tienda Cai Milio (de parada obligatoria), nos adentraremos en el barrio de Vivigo y lo cruzaremos hasta que termine la carretera poco después de pasar nuestra casa "Al otro lado del mar" . Aquí dejaremos el coche y tomaremos la pista que en unos quince minutos caminando nos llevará sin pérdida a la playa. Hacia el medio de la bajada nos toparemos con un hermoso mirador natural desde el que disfrutaremos de espléndidas vistas tanto del faro al este, como la playa de la Vallina al oeste. Al final del camino nos encontraremos con dos molinos de agua, uno de ellos a pie de playa.
En la playa hay varias cascadas de agua muy atractivas y en ella desemboca el rio Vivigo, que sirve de límite con el arenal de Valdredo. Es una playa, como la mayoría de la zona, de cantos rodados, por lo que se recomienda llevar un calzado adecuado para caminar por ellas.
Esta playa carece de servicios de salvamento y botiquin, es importante tenerlo en cuenta, por eso se recomienda precaución a la hora de tomarse un baño. Además de para el baño es ideal para practicar pesca submarina y un paraíso para los fotógrafos.